
Saliendo de la rotonda de ruta 3 con destino a Tres Arroyos, en la banquina sobre mano derecha, una serie de eucaliptus ofrecen las veces de un parador natural que ha sido aprovechado por diferentes devotos para hacer culto de mitos populares.
El gauchito Gil
Justamente ciudadanos provenientes del norte del pais y radicados en nuestro medio constituyeron este santuario en la ruta 3 y otro en la rotonda de ruta 75 camino a San Cayetano. Ultimamente se ha agregado en un eucaliptus cercano una imagen de tamaño real del Gauchito Gil y el mejoramiento de la ermita hecha totalmente en cemento y pintada de rojo.
La difunta Correa
En el año 2004 una pequeña casilla de no mas de 80 cm. de alto fue erigida al costado de la ruta 3 y en torno a ella como es habitual se comenzaron a dejar botellas vacias.
La historia de Deolinda Correa nace en San Juan cuando intenta atravesar el desierto en busca de su marido, junto a su hijo lactante. Deolinda pierde la vida deshidratada, pero su hijo sobrevive mamando sus pechos siendo encontrado por unos arrieros que forjan a partir de esa historia el mito de la Difunta Correa. Al conocerse la historia, muchos paisanos de la zona comenzaron a peregrinar a su tumba en Vallecito, construyéndose con el tiempo un oratorio que paulatinamente se convirtió en un santuario.
En la ciudad, desde setiembre de 2004 el culto cuenta con sus seguidores, aunque sus mas fieles devotos son viajeros que ven el oratorio y suelen dejar las tradicionales botella con agua como tributo a la entrega fisica que Correa realizó por su hijo.
San Expedito

Habitualmente el rezo tiene que ver con una oración especifica dedicada a San Expedito, constituyendose en los últimos años lugares de rezo como el que apareció a la vera de la ruta 3, con camino de pedregullo, casilla de chapa con imagen del santo incluida y cartel identificatorio.
Lo cierto es que esta serie de multiples devociones, muchas de ellas paganas y que durante años fueron perseguidas desde el Estado, hoy cuentan con total libertad de culto y las mismas se encuentran en aumento entre sus seguidores. La pregunta es ¿no deberá encontrarse un punto medio entre la represión y el ocultismo que sufrian años atras y la organización adecuada de espacios, que si bien pueden ser publicos, no haga que florezcan en forma anarquica?.
Una respuesta que deberan darse los mismos organizadores de dichos espacios de culto y otros que vayan llegando.